Episode 462: 31 de Enero del 2025 - Devoción matutina para Jóvenes - ¨Hoy es tendencia¨

====================================================SUSCRIBETEhttps://www.youtube.com/channel/UCNpffyr-7_zP1x1lS89ByaQ?sub_confirmation=1==================================================== DEVOCIÓN MATUTINA PARA JÓVENES 2025“HOY ES TENDENCIA”Narrado por: Daniel RamosDesde: Connecticut, USAUna cortesía de DR'Ministries y Canaan Seventh-Day Adventist Church===================|| www.drministries.org ||===================31 de EneroHijos del ReyPadre nuestro que estás en los cielos. Mateo 6: 9Con las siete palabras del versículo de hoy, Jesús dio inicio a la oración modelo y, desde entonces, millones de creyentes iniciamos nuestras oraciones de la misma manera. No creo que estas palabras tuvieran la intención de establecer un protocolo correcto para acercarnos a Dios, sino de recordarnos dos aspectos fundamentales acerca de él.En primer lugar, Dios es soberano; está -en los cielos-, es omnipotente, omnipresente y omnisciente. En otras palabras, el Dios de los cielos es trascendente. Sin embargo, al mismo tiempo, ese Dios majestuoso está tan cerca que, desde el principio, podemos dirigirnos a él como -Padre nuestro-. Los teólogos se refieren a esta cercanía con la palabra inmanencia. ¿No es esto maravilloso? Cuando oramos, nos acercamos al soberano del universo, que al mismo tiempo es nuestro Padre.En la antigua Roma se contaba la historia de un emperador que celebraba uno de sus mayores triunfos. Disfrutaba del privilegio que Roma otorgaba solo a sus paladines más ilustres: marchar con sus tropas por las calles de la ciudad, exhibiendo los trofeos de sus victorias y a los soberanos enemigos convertidos en esclavos en su séquito. Las calles estaban abarrotadas de una multitud emocionada que aclamaba a su emperador.Los altos y robustos legionarios se alineaban en dos filas paralelas a lo largo de las calles para mantener a la multitud en su lugar. En un punto del desfile, había un estrado donde la emperatriz y la familia imperial se habían ubicado para presenciar el evento. Allí se encontraba el hijo menor del emperador, un niño pequeño.Cuando el emperador se aproximó al lugar donde estaba su familia, el niño saltó del estrado, se abrió paso entre la multitud y trató de atravesar la fila de legionarios, pasando entre sus piernas para llegar al carruaje de su padre. Uno de los legionarios se agachó y lo detuvo, alzándolo en brazos, y le dijo: -No puedes hacer eso, muchacho. ¿No sabes quién es el que viene en ese carro? Es el emperador, no puedes correr hacia él». El pequeño respondió, riendo: «Será tu emperador, pero es mi padre-.Este es exactamente el sentimiento del cristiano con respecto a Dios. Él es todopoderoso, soberano y el sustentador del universo, ¡y al mismo tiempo es nuestro Padre amoroso! Acércate hoy a él con confianza.